Hablar de evaluación es en mi opinión hablar de metodología, del rol que ocupan en esa metodología tanto los alumn@s como los maestr@s (ahora denominados educadores según Heziberri 2020).
Si estamos intentando fomentar un aprendizaje en el que los verdaderos protagonistas sean los niñ@s, ¿porqué no hacemos lo mismo con la evaluación? ¿porqué no les hacemos participes de sus progresos, del camino que estan haciendo?
Muchas veces decimos que el rol que debe ocupar ahora el educador/a debe ser el de acompañante, pero, ¿como acompañar sin tener en cuenta al otr@?
Llevo unos años utilizando la fotografía como forma de registro en el aula (he de reconocer que me es más fácil que ir tomando notas o escribir un diario). Esto me ha permitido hacer un seguimiento de los procesos que se dan dentro del aula y a la vez, recoger una documentación para poder compartir con las familias. En la etapa de infantil, en la que las producciones de los niñ@s varía mucho de unos a otros, esta documentación me ha servido para que tod@s llevarán a casa un mínimo en el que se mostrara su avance del trimestre.
Este último curso he introducido las fotografías en mis entrevistas con las familias y he comprobado que es una herramienta muy útil a la hora de explicar el proceso (una imagen vale más que mil palabras) y que hemos podido hacer una especie de evaluación conjunta. Y que decir que las familias han sentido que sus hij@s tienen un seguimiento continuado.
Y casi como de casualidad (como muchas veces ocurre), me he dado cuenta que los propios niñ@s son conscientes de qué es aquello que podría ser "fotografiable", y se acercan para pedirlo. Poco a poco he sido consciente que es una forma que han encontrado de auto evaluarse.
En estos momentos en nuestro centro se está intentando consensuar todos estos temas (metodología, roles, evaluación, ...) y dentro de esta dinámica pudimos asistir a una ponencia de Neus Sanmarti sobre la evaluación. Intente recoger lo más importante en el siguiente resumen:
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